lunes, 12 de junio de 2017

LA MUELA – EL PAJARON – EL TEJO

LA MUELA – EL PAJARON – EL TEJO

Domingo 4 de junio con Juan, Pablo y Jose Antonio. Hoy nos habíamos propuesto una gran ruta con muchos picos, pero algunos errores de cálculo por nuestra parte y la tormenta que nos ha sorprendido, nos ha dejado una ruta algo descafeinada, pero esa es la grandeza de la montaña!!

Desde Campo de Béjar subimos con el coche a las Casas del Pobre, donde iniciamos la ruta.  Junto a la encina centenaria se inicia un sendero, a trozos marcado con hitos de piedra.  El sendero sube en dirección sur hacia lo alto de la montaña.  Cuando enlazamos con la pista de montaña, la seguimos un breve tramo y en seguida giramos hacia el oeste buscando las crestas de la Muela.  Si hubiéramos seguido un breve tramo la pista hacia el sur hubiéramos podido hacer la cumbre de la Gorra.

Seguimos cresteando la Muela en dirección oeste con la vista puesta en la cumbre del Pajarón.  Finalmente hay que hacer un duro tramo de subida (marcado con hitos) hasta la cima.  Ahora fijamos la vista en las tres cumbres del Tejo.  Calculamos si descender por el lado norte hasta el camino que conocemos y desde allí afrontar la subida al Tejo, o investigar la cómoda bajada que se adivina por el lado oeste.

Decidimos esta segunda opción, que al principio es muy agradable porque nos permite bajar con mucha comodidad y velocidad; además todo marcado con hitos.  Más adelante comprendemos que no ha sido una buena idea.  La senda cada vez se aleja más de nuestro objetivo y finalmente tenemos que abandonarla y cruzar monte a través hasta alcanzar las primeras estribaciones del Tejo.

Cuando empezamos a subir el Tejo por la cara sureste el cielo empieza a cubrirse de nubes y a “sonar” sobre nuestras cabezas.  Pensamos que tenemos tiempo para una subida rápida y vuelta hasta el coche que nos espera en la carretera.  Pero la subida, desconocida para nosotros, es bastante más dura de lo que habíamos previsto y la lenta ascensión nos hace llegar a la vaguada entre las tres cumbres cuando la tormenta ya es inminente.

Cuando empieza a caer granizo, buscamos un abrigo y esperamos a que pase la tormenta.  Después de media hora inactívos, el frío se mete en los huesos, por lo que decidimos empezar a bajar tan pronto cesa el granizo.  Aunque bajamos rápido, la tormenta se ha cebado con nosotros y nos vuelve a machacar con grandes dosis de piedras, pero ya no paramos…,“aún tenemos la cabeza dura”.

Cuando finalmente terminamos el descenso nos encontramos con el último problema: las ramblas se han desbordado y no podemos cruzarlas.  Tenemos que caminar en paralelo a la carretera metiéndonos dos o tres palmos en las torrenteras de agua hasta encontrar un paso elevado que nos permite salvar la gran rambla y llegar al coche, por supuesto empapados hasta los huesos.

La montaña es así, unos días da sol y calor, y otros lluvia  y frío.  Hoy hemos tenido una buena ración de las dos partes.  Pero habrá que volver (posiblemente en otoño) para rememorar esta ruta y seguirla, seguramente en sentido contrario, para aprenderla bien.

                                            

Tomás Franco    


La Encima Milenaria

Silueta del Pajarón


Torta y Salchicha = La Gasolina de Pablo

Ya queda menos para la cima




¡¡Cumbre!!



La Silueta del Tejo
 

Sobre las cimas del Tejo 


Haciendo el buitre

Y se desató la tormenta...

¡¡Al rico pedrisco!!

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